¿Piensas que por tener esta edad llegaste tarde a la fiesta?
Te equivocas. En Fintelhub® creemos firmemente que “nunca es tarde cuando el despertar llega” (adaptamos la frase a nuestro estilo).
Así es, todavía tienes años por delante para construir patrimonio y sumar activos que te ayuden a tener un retiro relativamente tranquilo.
Si bien es cierto que saber que pasará en el futuro es algo imposible, podemos predecirlo en alguna medida con las acciones y decisiones que tomemos hoy. Por ello, te decimos que aún puedes iniciar un plan de inversión que sume a tu estabilidad financiera en el futuro, pero debes empezar a ocuparte de ello HOY.
Nunca es tarde cuando el despertar llega. Share on XInvertir a los 50 años
Piénsalo. ¿Te gustaría tener una vejez tranquila? Sin tener que seguir trabajando por el desespero de no tener ni un centavo en la próxima quincena o esperando exclusivamente el apoyo económico de tus hijos (si los tienes).
Puede que pienses que eso solamente pasa en las películas o a las personas con mucho dinero, pero la verdad es que para alcanzar esa paz y tranquilidad financiera es posible con armar una estrategia y plan de retiro.
Sabemos lo que hay en la profundidad de tu mente: lamento por no haber empezado antes con propiedad. Pero de nuevo, aún hay mucho por hacer. Ciertamente en el pasado quizás estos temas te parecían aburridos, o incluso, tan distantes que decidiste no prestar atención. Por suerte, nunca es tarde y puedes corregir tu camino financiero siguiendo estos consejos prácticos para invertir a los 50.
Consejos prácticos para la planificación de tu retiro
Se puede alcanzar la paz y la tranquilidad financiera, armando una estrategia y plan de retiro. Share on X1. Conoce lo que tienes y lo que necesitas
Si hasta el momento has tenido algún empleo formal y has tomado ventaja de los posibles beneficios que te haya ofrecido tu empleador, si es el caso, seguramente tendrás un fondo para el retiro con algo de dinero acumulado. Por su parte, si eres profesional independiente o tienes un negocio propio, entonces si tienes algo de ahorros, pues estos serán tu propio fondo de retiro. Como sea la situación, lo primero que necesitamos saber es desde dónde vamos a partir financieramente y a dónde queremos llegar, para entonces crear un plan específico a nuestras necesidades.
Una vez que conozcas lo que tienes en tus cuentas, es momento de tomar una hoja y papel, o la computadora, y una calculadora. Aunque los precios de las cosas van subiendo año tras año, podemos comenzar haciendo un presupuesto sobre lo que necesitaremos para cubrir nuestros gastos a precios de hoy.
Empieza por hacer una lista de las cosas básicas para el estilo de vida que deseas. Por ejemplo, toma en cuenta el dinero para la renta, comida, transporte, entretenimiento, e incluso si tienes alguna condición médica que requiera medicamentos o tratamiento prolongado, entre otros gastos de vida. Luego, súmalas para estimar cuándo necesitarás tener por mes, y al multiplicar por 12, pues tendrás el monto de dinero por año.
Según estudios recientes, la esperanza de vida de una persona sana en Estados Unidos es de 76.1 años, lo que dependerá de muchos factores, pero puede servir para calcular un estimado del tiempo en el cual deberás distribuir tus ahorros luego del retiro.
Por su parte, la edad promedio de retiro en los Estados Unidos es a los 67 años. Esto quiere decir que como mínimo hay un espacio de 10 años en el cual debemos tener recursos para mantenernos por nuestros propios medios, asumiendo que realmente quieres dejar de trabajar, (por ejemplo, el Profe Julio dice que va a dar clases así sea con bastón).
Además, según una publicación del diario ‘USA Today’, en la actualidad promedio de dinero que se gasta un estadonidense durante su etapa de jubilación puede alcanzar los $987,000, una cifra que puede variar dependiendo del estado o la ciudad dónde vives. Evidentemente no es una regla, es un aproximado que varía dependiendo de cada caso.
Hay otra regla que indica que se necesita aproximadamente el 80% de tu ingreso previo al retiro, dado que en el futuro no tienes la carga de una casa grande, hijos, estudios, y afines al ritmo familiar si la tienes. Es decir, si hoy día ganas $100,000 al año, en teoría, al retirarte necesitas solo $80,000. Es otra manera de hacer las estimaciones, y eventualmente habría que ajustar las cifras por inflación.
Una vez que conozcas el estimado de lo que necesitas, es momento de pasar a la acción implementando una estrategia y plan de inversión.
2. Establece metas
Cuando sepas cuál es tu punto de partida y el de llegada, puedes comenzar a definir también otras metas a corto y mediano plazo. Una forma fácil de determinarlas es dividir la cantidad que te hace falta y el número de años que todavía podrás seguir aportando.
Por ejemplo, supongamos que tienes 55 y quieres retirarte a los 62, que es la edad requerida para poder acceder a los beneficios reducidos del Seguro Social en Estados Unidos, y todavía te faltan $7,000 para tu objetivo, entonces deberías dividirlos entre los siete años que quedan por aportar. Así, cada año deberás tener un ahorro mínimo de $1,000.
Por otro lado, si prefieres retirarte a los 67, que es cuando podrás acceder a los beneficios completos, deberás dividirlo entre 12, obteniendo un total de $583.33 para las aportaciones.
Para las metas a corto plazo solo necesitarías dividir nuevamente el total del año entre 12, lo que también te ayudará a que sea más fácil, pues cuando observar que debes invertir $48.61, siguiendo con nuestro ejemplo, en lugar de $583.33 te sentirás más motivado.
Ahora bien, algunas veces tenemos bonificaciones o ingresos extras como el aguinaldo o bono de productividad de fin de año. Usualmente este dinero lo terminamos gastando en regalos o compras impulsivas. En lugar de eso, puedes colocar en tus metas a mediano plazo el dar un abono más grande en esas fechas, de manera que cuando el dinero esté en tu cuenta no sientas el impulso de gastarlo todo, sino que inviertas también una buena porción del mismo.
3. Conoce tus opciones de ahorro
Además de los aportes que dan los empleadores y las del seguro social, existen también los Fondos de Ahorro Individuales (Individual Retirement Account o IRA, por sus siglas en inglés). Estas son cuentas en las que puedes colocar tus aportes voluntarios que te ayudarán a obtener un retiro más cómodo.
Existen dos modalidades de cuentas IRA:
En palabras simples, lo que hace diferente una a la otra, es que en con el IRA tradicional tú puedes hacer aportes hasta los 70 años y medio, estos aportes son deducibles de impuestos en el año en que hagas el aporte, y el dinero invertido crecerá libre de impuestos, pagando estos últimos en el futuro cuando empieces a hacer retiros del plan.
En cambio, la modalidad Roth IRA no tiene un límite de edad, sus aportes no son deducibles de impuestos, pero el dinero crece libre de ellos y no pagas impuestos en el futuro cuando hagas retiro de los fondos acumulado.
La modalidad que más te convenga depende de múltiples factores.
4. Infórmate sobre las inversiones
Una vez que calculaste la cantidad básica que necesitas y la manera en la que la destinarás para el retiro, ahora continuemos explorando las opciones para lograr que tu retiro sea lo más cómodo posible. Y, para conseguirlo, la inversión pasiva es una manera de ayudarte a crecer tu dinero.
Teniendo el panorama claro de lo que necesitas, la primera gran inversión que debes hacer es en tu educación. Bien sea leyendo más artículos como este, escuchando Despierta Tus Finanzas Podcast, o incluso participando en uno de nuestros programas, tal como Despierta Tus Inversiones.
Tu misión es entender como funciona la inversión pasiva en la bolsa de valores para que tengas plena noción clara de como va a funcionar todo el mecanismo de preparación para el retiro, bien con tu plan a través de tu empresa, cuentas IRA, o cuenta de inversión personal.
La primera gran inversión que debes hacer es en tu educación. Share on XDe igual modo, puedes recurrir a los servicios de un asesor de inversiones calificado que te ayude a explorar tu situación y formular una estrategia.
5. Diversifica tus ingresos
Es posible que al hacer los cálculos lamentes no haber empezado 20 años antes con este proceso. Pero te repetimos, aún hay tiempo para corregir el camino.
Un aspecto que la mayoría de las personas mayores de 50 olvida, es que tienen algún tipo de experiencia y conocimiento acumulado. Todavía tienen como mínimo 5 a 10 años por delante para desarrollar alguna nueva línea de ingresos paralela, que si bien es cierto, no es una inversión en una cuenta de retiro, es una fuente de ingresos que puede ser sólida para cuando lleguen los años de retiro.
Por ejemplo, si tienes algún capital financiero disponible podrías empezar algún negocio. Si no lo tienes, basta con invertir tiempo y capital intelectual para integrarte a la economía digital monetizando tu conocimiento y talento, enseñando algo que sabes a quien necesite de tu conocimiento o dando consultoría basada en tu trayectoria profesional.
Si logras sistematizar procesos con esto, puede ser una fuente de ingresos consistente en par de años, y así contar con un soporte adicional en los años dorados.
Empieza ahora con inteligencia financiera
Ciertamente, estás ya en una fase en la que el tiempo se ha vuelto mucho más valioso, por ende, es momento de dejar la procrastinación y pasar a la acción.
Con educación y convicción, el progreso está a tu alcance. No es tarde para robustecer las bases de un retiro en bienestar y con paz financiera.